Estrategia a 5 años

Estamos a poco de que se cumplan tres años del comienzo de la pandemia de Covid 19. Aun seguramente tenes muy fresco el recuerdo de esos primeros meses de encierro y te parecerá que fue hace muy poco. Quizás seguís manteniendo algunos hábitos incorporados por aquel tiempo, un hobbie, las videollamadas con familiares y amigos, entrenar en casa, etc.

Cuando miramos hacia atrás notamos lo rápido que pasa el tiempo. Pero ¿Qué pasa cuando miramos hacia adelante?

En este nuevo artículo intentaré que mires tus inversiones hacia adelante, con la misma sensación que sentís cuando mirás al pasado.

Si mirás cinco años atrás sentirás que todo pasó muy rápido. Yendo al terreno que nos ocupa en este espacio, el de las inversiones, quizás aun hoy sigas manteniendo inversiones que aportan poco o ningún rendimiento real. Seguís renovando una y otra vez tu plazo fijo, o guardando tus dólares en la cuenta o la caja de seguridad, o peor aún, ahorros “bajo el colchón”. Tal vez lleves cinco o diez años haciendo lo mismo con tu dinero sin que ello te genere planteo alguno.

Ahora bien, si te digo que tengo para mostrarte una inversión que podría salir muy bien de acá a cinco años, ¿Qué dirías? ¿Te parece mucho tiempo pensar hoy en una inversión para cinco años?

Una vez más la característica de incierto que tiene el futuro nos hace ver con excesiva prudencia y hasta miedo, un escenario que cuando miramos hacia atrás ese mismo plazo, nos parece que fue ayer.

Vuelvo como empecé el artículo, tres años ya pasaron del inicio de pandemia… ¿te sigue pareciendo mucho pensar en cinco años? ¿Te animas a seguir leyendo la propuesta que tengo para hacerte? Si llegaste hasta acá acompañame, son solo cinco minutos más.

 

Propuesta

Pasemos de lleno a la propuesta que tengo para hacerte hoy. De acá a cinco años, ¿Cuál crees que va a ser el sector económico que va a tener un mejor desempeño, y por qué crees que es el tecnológico?

Más allá del chiste en la pregunta, te propongo pensar por un momento en todo lo que abarca la tecnología: Inteligencia artificial, internet, comunicación, información, chips, biotecnología (ligada a la salud, al agro, a las energías limpias, etc.), entre otras. 

En cinco años (y más también) qué crees:

-        ¿Va a haber más, o menos inteligencia artificial?

-        ¿Más, o menos chips?

-        ¿Más, o menos comunicación?

-        ¿Más, o menos biotecnología?

-        ¿Más, o menos energías limpias?

Y ¿Qué opinás del sector financiero de acá a unos años? ¿Te parece que los bancos serán el sector del futuro con las fintech acechando el negocio y la descentralización que viene cada vez más arraigada en los jóvenes? Si sos como la mayoría de los humanos, seguramente ves un futuro mejor para el sector tecnológico que para el financiero.

Dicho esto: ¿Dónde tenes tus ahorros hoy? ¿En qué invertís?

Dejame contarte algo: Desde Argentina es posible invertir en las principales compañías tecnológicas del mundo que cotizan en Estados Unidos. Todas estas compañías ligadas a la tecnología se encuentran agrupadas en el mercado de valores llamado Nasdaq, que actualmente cuenta con algo más de 3.800 compañías.

Entre las empresas más conocidas que componen el Nasdaq podríamos mencionar: Microsoft, Apple, Google, Adobe, Amazon, Meta, Tesla, Netflix, Bioceres, Intel, AMD, Nvidia, Qualcomm, y la lista sigue. Como podés ver, incluye comunicación, información, chips, biotecnología, etc.

¿De qué manera es posible invertir en Argentina en todas estas empresas a la vez? A través del Cedear del ETF (que es algo similar a lo que localmente conocemos como un fondo de inversión) llamado QQQ.

El Cedear QQQ replica al índice Nasdaq con la posibilidad de que, en una sola compra de este activo, puedas lograr una gran diversificación entre las diferentes firmas ligadas a la tecnología, y los distintos tipos de tecnología.

El Cedear puede adquirirse en pesos desde cualquier broker local, y el monto mínimo a la fecha (20/02/2023) es de $5.600 (equivalente al valor de un Cedear del QQQ).

La gran ventaja de este activo es que no solo nos permite invertir desde nuestro país en las principales compañías del sector tecnológico a nivel mundial, sino que por ser un Cedear el instrumento del cual hablamos, su evolución está también ligada al dólar. Es decir, la inversión que se haga en el Cedear del ETF QQQ va a depender de dos variables: El sector tecnológico a nivel mundial, y la cotización del dólar en nuestro país. Si a ambas variables le van bien, nuestro activo se verá doblemente beneficiado.

Si crees que al sector tecnológico le va a ir bien, y si pensas que el Dólar va a seguir subiendo ¿Qué esperas para ir sumándote a esta idea?

Si en lugar de un ETF preferís una administración más activa de tu cartera podes seleccionar vos mismo las empresas de las cuales te gustaría ser parte, pero siempre tendrás que tener presente el objetivo de diversificar y no apostar todo a una única compañía.

 

Timming

Muchas veces me habrán leído que suele ser tan o mas importante el “cuándo” compramos, que el “qué” compramos. Y a eso me refiero con el timming que se debe tener, prestando mucha atención al ciclo del mercado en el cual se está comprando.

Respecto al “qué compramos”, si adquirimos el Cedear del ETF QQQ y lo mantenemos por al menos cinco años, sabemos que estamos comprando un sector con todo el crecimiento y la inversión por delante. Entiendo que comprando tecnología el “qué” lo tenemos asegurado.

Pero ¿Qué sucede con el “cuándo" compramos?

El mercado de EEUU tiene la característica de pasarse más tiempo en alza que corrigiendo. En un artículo anterior te mostré que en los últimos 50 años, EEUU tuvo 23 movimientos correctivos (bajistas) en la bolsa, de los cuales pudo salir ganando 23. Si, el 100% de las veces pudo revertir las correcciones y acabar ganando.

Este análisis nos debe dejar como enseñanza que cada momento de corrección a la baja de los índices norteamericanos resultó ser una excelente oportunidad de compra. Por supuesto que este aprendizaje te lo digo observando el diario del lunes, donde ya todo es noticia pasada. ¿Pero que pasa hoy?

En la actualidad el índice Nasdaq (al igual que los otros índices SP500 y Dow Jones) se encuentra corrigiendo a la baja desde 2022 luego de un 2021 muy alcista pasada la caída por pandemia (VER GRÁFICO).


 

La caída actual encuentra gran parte de su explicación en la política monetaria de altas tasas implementada por la FED en EEUU como mecanismo para frenar la inflación. Una estructura de altas tasas suele perjudicar a las empresas más nuevas y pequeñas, mayormente tecnológicas, que necesitan financiamiento. El encarecimiento de los tipos de interés incrementa el pasivo de las empresas afectando su valuación. Esto afecto los índices americanos en 2022 y lo que va del 2023.

La buena noticia acá es que la tasa del bono norteamericano a 10 años está por debajo de la del bono a 2 años. Eso quiere decir que el mercado ya descuenta que en un periodo mayor a dos años la autoridad monetaria logrará controlar la inflación y llevará las tasas nuevamente a la baja. La confianza y las expectativas mandan en los mercados y ambas están a favor del sector tecnológico para un plazo como el que venimos hablando, de acá a cinco años.

Lo que la tecnología aun no pudo lograr es dotarnos de una bola de cristal capaz de predecir el futuro, la cual pueda decirnos si estamos próximos a frenar la caída en los índices y salir rebotados al alza, o si todavía queda recorrido bajista. De momento el avance tecnológico no llegó a tanto. Lo que sí podemos pensar es que viendo los diarios de tantos lunes en 50 años, una caída en estos índices es señal de un buen timming de compra.

Ademas del “qué”, ahora tenemos también el “cuándo” compramos.

El principal enemigo en esta propuesta no esta en el riesgo asociado que tiene la renta variable. El enemigo a vencer con esta idea es tu propio cerebro que te presentará lucha para hacerte ver que cinco años es un plazo al cual no estas listo para pensar. Para darle pelea a tu cerebro te aconsejo que te fijes objetivos concretos que te gustaría cumplir en ese plazo, y comiences a apartar una parte de tus ahorros a tal fin.

Repetí conmigo: “cinco años no son nada”.