Cómo empezar a invertir

 


Si sos de los que quieren empezar a invertir pero no saben cómo hacerlo, esta nota es para vos.

A lo largo de este artículo te vamos a llevar de recorrida por los distintos instrumentos de inversión. Te contaremos cuáles se adaptan más a tus necesidades y cómo comenzar a operarlos.

El primer paso para dejar de ser ahorrista y convertirte en inversor es conocer las distintas posibilidades de inversión que existen. Cada instrumento tiene sus características y tenes que conocerlas antes de colocar tus ahorros en alguno de ellos.

A continuación te dejamos una breve reseña de cada instrumento para luego darte alguna recomendación acerca de su uso. Comencemos.

 

Plazo Fijo: En lugar de pedirle prestado al banco, somos nosotros los que le prestamos nuestro dinero al banco por un plazo determinado y a cambio del pago de un interés. Todos los bancos hoy ofrecen una tasa del 133% anual a las personas que colocan su dinero a plazo fijo. Esa tasa que a priori parece ser muy inferior a la inflación actual puede llegar a convertirse en un 253% anual si al cabo de cada vencimiento del plazo fijo, renovamos capitalizando los intereses haciendo el famoso interés compuesto. Es decir, si hacemos un plazo fijo tradicional a 30 días y lo renovamos todo el año sumando los intereses al capital, acabaremos más que triplicando la inversión inicial. Si a cada vencimiento le agregas un poco más que vayas ahorrando cada mes, el resultado será todavía mejor.

Existe una modalidad de plazo fijo llamada Plazo Fijo UVA que en lugar de pagar una tasa de interés, ajusta el capital por dicho índice que mide la inflación. Es una manera de cuidar los ahorros del incremento en el costo de vida, pero debes saber que el plazo mínimo de imposición es 90 días y no 30 como el tradicional.

Los plazos fijos los haces desde un banco, a través de sus aplicaciones, Home Banking, o también de manera presencial. El plazo mínimo es 30 días y el monto mínimo $1.000.-

El consejo que podemos darte respecto a este instrumento es que te acostumbres a tener varios plazos fijos con distintos vencimientos, aunque sean chicos, y no un solo plazo fijo grande. Tener divididos los plazos fijos con vencimientos en distintos momentos del mes no alterará el rendimiento total, y te va a permitir tener liquidez disponible en caso de necesitarla. Así que si juntaste más dinero, no esperes a que te venza el plazo fijo para sumarlo al existente… ¡hace uno nuevo!

 

Dólar: Hoy podés comprar dólar de forma legal de dos maneras: Dólar “solidario” o Dólar MEP. El llamado dólar solidario es el que algunos todavía pueden comprar por bancos con el límite mensual de U$S 200 (cepo). El dólar MEP o bolsa es la manera de comprar dólares sin cepo (sin límite mensual), en blanco, y de forma sencilla. A diferencia del solidario en el que el mismo sistema dice si uno puede o no comprar, el dólar MEP siempre deja comprar y pasa por uno saber si reúne los requisitos para hacerlo. Los requisitos para acceder al Dólar MEP son:

-        No haber comprado dólar solidario los últimos 90 días (es decir, no se pueden comprar ambos dólares a la vez, habrá que optar por uno)

-        No estar adherido a los subsidios ni recibir ayuda alguna del Estado Nacional.

-        Contar con una caja de ahorro dólar en un banco, ya que los dólares MEP se acreditarán allí para que después puedas disponer de ellos como prefieras.

Si bien se puede comprar dólar MEP a través del banco, la recomendación es hacerlo a través de una sociedad de bolsa, los llamados Brokers, que ofrecen mucha más agilidad, misma seguridad y un menor costo operativo. Más adelante en este mismo artículo veremos cómo abrir este tipo de cuentas.

El valor del Dólar MEP es un poco mayor que el solidario, y por lo general se ubica por debajo del dólar informal (o blue). La ventaja del MEP es que permite dolarizar ahorros sin límite. Es más, si ya contas con ahorros en pesos y deseas convertirlos a dólar, a través del Dólar MEP lo podes hacer de una sola vez y en forma legal. Y una cosa más, no tengas miedo, hacer Dólar MEP es solo apretar un botón y al otro día tendrás los dólares en la cuenta de tu banco.

 

Hasta aquí los dos activos clásicos para inversores con un perfil más conservador. Sumando ambos tipos de activos se estaría diversificando para lograr una cobertura contra la inflación y la devaluación. Es importante no colocar todos los ahorros en un mismo instrumento ya que de esa manera se quedaría expuesto en un todo a lo que vaya a pasarle a ese único activo elegido.

A continuación pasemos a instrumentos con un grado más de exposición a riesgo pero que, si se los sabe esperar, pueden dar mejores rendimientos a largo plazo.

 

Cedears: A través de este instrumento que se puede adquirir con pocos pesos y de una manera muy simple, un inversor principiante puede convertirse en accionista de las principales empresas a nivel mundial. Todas esas empresas que te rodean a diario, Google, Microsoft, Apple, Coca Cola, Disney, Mac Donald’s, Starbucks, Amazon, Mercado Libre, Meta Platforms, entre muchas otras, pueden ser parte de tu cartera de inversiones.

Para acceder a estas empresas debes abrir una cuenta en una sociedad de bolsa, que como te dijimos ya vamos a hablar más adelante. No se requiere gran capital ni contar con dólares o cuenta en el exterior.

La ventaja de invertir en estos instrumentos es que la historia muestra que a largo plazo el mercado estadounidense suele tener rendimientos superiores a la inflación y el dólar en argentina. Y no solo eso, dado que serán activos comprados en pesos pero que cotizan en EEUU, tu inversión en cedears estará ligada a la evolución del dólar, por lo que si el dólar sube tu inversión también lo hará.

Además te aseguramos que puede ser muy divertido contar con tu cartera de empresas de las cuales sos usuario, ¡y ahora dueño!

El monto mínimo para invertir es el valor de un cedear que va a depender de la empresa que elijas. Para que tengas una referencia, un cedear de Google sale $700, Amazon $270, Apple $6.200, Microsoft $3.600 y Disney $3.100 por nombrarte algunos. Es decir, con un capital inicial de por ejemplo $10.000 podes armarte una cartera con varias empresas. En cuanto al plazo de permanencia de la inversión la decidís vos, podes vender y cobrar cuando quieras, claro que la recomendación para estos activos de renta variable es sostenerlas en el tiempo.

 

Acciones: Así como mediante los cedears uno puede convertirse en accionista de empresas que cotizan en EEUU, a través de las acciones uno puede ser dueño de las empresas argentinas que cotizan a nivel local. YPF, Banco Galicia, Pampa Energía, Telecom, Transportadora Gas del Sur, Cresud, IRSA, Aluar, son algunos ejemplos que se pueden adquirir también con un muy poco capital en pesos.

En 2022 por ejemplo, las acciones argentinas fueron la inversión ganadora del año superando al plazo fijo, el dólar y los cedears. Desde ya que los resultados pasados no aseguran mismo desempeño a futuro, pero esta bueno conocer todos los instrumentos para tener bien diversificados los ahorros.

Tanto los cedears como las acciones integran lo que se llama Renta Variable en las inversiones.

El monto mínimo para invertir es el valor de una acción. A modo de ejemplo: Banco Galicia $420, Pampa Energía $450,  Telecom $350 e YPF $3.800.


Bonos: Son instrumentos mediante los cuales se financian los estados y las empresas. Si los emiten los estados (nacional, provincial, etc.) se llaman Títulos Públicos; en tanto que si el emisor es una empresa privada recibe el nombre de Obligaciones Negociables (ON).

Estos activos pertenecen a los instrumentos llamados de Renta Fija (al igual que un Plazo Fijo) ya que uno de antemano podría conocer las condiciones pactadas para el cobro. Es decir, al comprar un bono vas a saber la forma en que te van a devolver el capital, el interés, la tasa pactada, si te lo van a devolver en cuotas o todo al final, y  por supuesto el plazo.

La diferencia sustancial con el plazo fijo es que suelen tener algo más de riesgo asociado y es por eso que por lo general su rendimiento es mayor.

Tanto mediante títulos públicos como con ONs vas a encontrar la posibilidad de comprar esos instrumentos con pesos y luego salir en dólares. La diferencia en este caso entre Títulos y ONs pasa por elegir el emisor que preferís te deba. Si preferís que te deba una empresa optá por una ON, y si en cambio preferís ser acreedor del Estado vas a poder elegir entre los distintos títulos públicos existentes.

Merece la pena mencionar que por lo general las empresas de primera línea que emiten Obligaciones Negociables para financiarse, suelen honrar sus pagos ya que de otra forma no podrían volver a acceder a financiamiento de este tipo. Y al pagar un interés en dólares, pueden ser una buena opción para aquellos que quieren dolarizar sus ahorros pero sin tenerlos parados.

Si bien nombramos los bonos pagaderos en dólares, existen otros que ajustan el capital de acuerdo con el avance de la inflación (llamados BONOS CER), otros que están ligados a la evolución del tipo de cambio oficial (llamados DOLAR LINKED), existen bonos que pagan de acuerdo a lo que rinda más entre la inflación y el dólar oficial (llamados BONOS DUALES), y los más clásicos bonos que pagan tasa de interés que son los más parecidos a un plazo fijo. De acuerdo a lo que el inversor crea que pueda ser el evento con un incremento mayor será el bono a elegir, si se espera una inflación alta quizás los Bonos CER puedan ser una buena cobertura, lo mismo si se espera una fuerte devaluación en ese caso la opción elegida debería ser un bono Dólar Linked. 

El monto mínimo dependerá del bono elegido. Los montos son accesibles aunque quizás un poco más elevado que los vistos en cedears y acciones. Lo que sí debe tenerse en cuenta respecto de los bonos es prestar especial atención al vencimiento de los mismos ya que los hay de diversos plazos.

 

Con acciones, bonos y cedears, incorporamos a la lista de instrumentos aquellos que se adaptan mejor a un mediano y largo plazo (más de un año).

Para terminar con los instrumentos, vamos a pasar a los dos que se utilizan para hacer rendir hasta ese dinero que pensas usar dentro del mes en tus gastos habituales. ¡No vamos a dejar nada sin trabajar!

 

Fondos Comunes de Inversión. Se trata de un patrimonio formado por varios inversores que comparten un mismo objetivo y perfil, el cual estará administrado por profesionales idóneos en la materia. Una de las características principales de un FCI es su liquidez, uno puede recuperar los fondos allí invertidos en un plazo que va desde el plazo inmediato hasta las 48hs según el tipo de fondo. Y hablamos de “tipos” de fondos ya que hay fondos conservadores, moderados y agresivos, dependiendo de los instrumentos que integran dicho patrimonio.

Para perfiles más conservadores existen fondos que tienen su cartera integrada por depósitos a plazo fijo y cuentas remuneradas, que rendirán apenas por debajo de un plazo fijo tradicional, pero con la ventaja de la liquidez inmediata que permite obtener los fondos cuando el inversor lo decida sin tener que esperar ese plazo mínimo de 30 días.

Perfiles más arriesgados pueden utilizar otros tipos de fondos como podrían ser aquellos que tienen su patrimonio integrado por bonos, acciones o un mix de ellos.

El fondo común de inversión es uno de los instrumentos que mejor cumple la función de hacer rendir el dinero que se va a usar en el cortísimo plazo (menos de 30 días). Por ejemplo, si desde que cobras tu sueldo hasta el día que tenes que pagar el alquiler hay 10 días, podes poner tu dinero a trabajar durante ese plazo y sacarlo el día que tengas que pagar.

Si bien se puede invertir en un FCI por plazos mayores, quizás para períodos más largos puedan rendir mejor el resto de los instrumentos antes vistos.

Se puede operar con FCI a través de los bancos o de las sociedades de bolsa y el monto mínimo es $1.000.-

 

Caución bursátil. El otro instrumento que mejor se adapta a hacer rendir el dinero corriente que se deberá utilizar dentro del mes. La caución es la forma de hacer un plazo fijo en la bolsa, que a diferencia del plazo fijo en un banco, permite hacerlo por plazos menores: de 1 a 120 días. Yendo al ejemplo anterior del pago del alquiler en 10 días, podrías hacer una caución por ese plazo y asegurarte de contar al vencimiento con el capital más los intereses generados.

Para operar la caución bursátil también necesitas contar con una cuenta comitente en una sociedad de bolsa, y el monto mínimo para caucionar es $1.000.-

 

Como dijimos, tanto con Fondos Comunes de Inversión como con la Caución bursátil podés poner a trabajar tu dinero por tiempos muy cortos, y así hacer rendir ese dinero que necesitas usar durante el mes y que por lo general lo tenes parado en tu caja de ahorros.

 

Ya conoces los distintos instrumentos. Sabes cuáles son más conservadores si sos de los que te gusta dormir tranquilo por las noches. Y ya conoces también aquellos que llevan algo de riesgo asociado pero que te pueden permitir ganar más en el tiempo.

Lo próximo que debes saber es un concepto que tenes que grabarte a fuego, y tatuártelo si es necesario: DIVERSIFICAR.

La diversificación, es decir repartir tu ahorro entre las distintas opciones de inversión y no colocar todo en un único activo, tiene una doble función.

Por un lado te sirve como protección en caso de que algún evento o medida afecte un determinado instrumento. El famoso “no poner todos los huevos en una misma canasta”. Y si estas leyendo estas líneas desde Argentina con más razón, sabrás que siempre alguna noticia (de las no tan buenas) llegan de repente para afectar tus ahorros.

Y por otro lado la diversificación tiene un aporte a la rentabilidad de tu patrimonio ya que es la manera en la que podés encontrar esa inversión estrella que de haber apostado a una sola, solo dependerías de tu puntería o tu suerte. Al contar con todas las inversiones existentes, si una funciona muy bien vas a contar con ella.

Así que ya sabes, a diversificar tus ahorros.

 

Cómo abrir una cuenta para invertir

Te dijimos que te íbamos a contar cómo abrir una cuenta de inversión en una sociedad de bolsa y ahora vamos a hacerlo.

Una Sociedad de Bolsa, Broker o Alyc, como suele llamarse, es una entidad que tiene autorización para asesorar y realizar inversiones de valores en los mercados financieros. Actúa como intermediario entre los inversores dispuestos a comprar activos financieros y “el mercado”. Para actuar como Sociedad de Bolsa la entidad debe estar regulada por la Comisión Nacional de Valores (CNV) así como los bancos se encuentran regulados por el BCRA.

La tecnología hoy en día permite que uno pueda abrir una cuenta de inversión (técnicamente se llaman Cuentas Comitentes) desde una PC o un celular en muy pocos minutos. Es muy similar a abrirse una cuenta en una red social, algunos datos personales, un par de selfies, foto del DNI y listo para operar.

Estas cuentas comitentes tienen la particularidad de que no cobran costo alguno por mantenimiento, es decir que podrías abrirte una ahora mismo al terminar de leer estas líneas, tan solo para saber cómo es, y eso no te generará gasto alguno. Es más, ni siquiera necesitas mandarle dinero, podes abrirla solo para curiosear.

Ahora bien, a invertir se aprende invirtiendo, así que nuestra recomendación es que te animes a abrir la cuenta y que le transfieras algo de dinero para animarte a dar tus primeros pasos como inversor.

Las sociedades de bolsa más conocidas, por nombrar algunas, son: Invertir Online, Balanz, Bull Market, etc. Buscalas en internet y vas a ver que son muy amigables y te guiarán en el paso a paso para abrir tu cuenta (y si aún te da miedo, contactanos).

Con la cuenta ya abierta solo necesitaras mandarle fondos. La única manera de fondear una cuenta comitente es a través de una transferencia bancaria por lo que tendrás que hacerla desde tu app del banco o tu home Banking. No se puede depositar en efectivo en una cuenta comitente y es por eso que toda operación realizada en estas sociedades de bolsa son operaciones en blanco, legales.

Y respecto a la seguridad de estos brokers dejanos que te contemos algo muy importante. La única manera de sacar los fondos de la cuenta comitente es a través de una transferencia a una cuenta bancaria del mismo titular. Esto quiere decir que si alguien te roba el celular o accede a tus datos, no podrá usar el dinero allí depositado ni transferírselo a otra cuenta en la que no estés vos de titular.

 

Manos a la obra

Ya llegaste hasta acá, estas decidido a invertir… ¿Cómo empezas?

Comenzá por proteger tu capital. Eso te va a dar seguridad. Para eso vimos los dos instrumentos que mejor se adaptan. Hace uno o varios plazos fijos y si podes comprá dólares. No importa que empieces con muy poco, a caminar se empieza de a un paso y este camino de ahorrista a inversor no es la excepción a la regla.

El dinero que sigas ahorrando luego de haber protegido tu capital, lo podrás colocar en inversiones a plazos más largos con el objetivo de hacerlos rendir un poco más. Para eso podrías diversificar entre las distintas opciones vistas como cedears, bonos y acciones. Empezá de a poco, elegí acciones de empresas que te gusten, que conozcas su negocio y de las que seas usuario. Diversificá a su vez entre empresas de distintos sectores económicos y de distintos paises. En cuanto a los bonos, también podes diversificar y no comprar uno solo.

Y ese saldo que mantenes en tu caja de ahorro para tus gastos corrientes, andá probando de a poco de mandarlos a un Fondo Común de Inversión, una billetera virtual remunerada o una caución bursátil. El dinero que mantenes en tu caja de ahorro no te paga nada e incluso va perdiendo poder de compra producto de la inflación.

Y una vez más, empezá de a poco, ganá confianza, pero empezá. Seguramente te cuesta mucho ganar tu dinero como para dejar que la inflación te quite poder de compra y sobre todo poder de sueño, porque en definitiva, todo lo que soñamos va a necesitar de recursos que hagan que esos sueños puedan hacerse realidad.

Llegaste al final del artículo, el primer paso del camino de ahorrista a inversor ya esta dado, ahora te damos permiso para dejar de leer y ponerte a abrir tu cuenta comitente. Necesitas ayuda? Contactanos!