Un partido difícil
Si sos de los que invierten sus ahorros
en plazo fijos o comprando dólares, aun sabiendo que se pierde contra la
inflación, y no te animás a otras alternativas porque las consideras riesgosas
o simplemente por desconocimiento… este articulo va para vos.
QUÉ NOS ESPERA
El 2021 nos dejó una inflación anual en
torno al 52%. Las tasas de los plazo fijos para ese periodo rondaron en
promedio el 37%. No necesitamos de muchos conocimientos matemáticos ni
financieros para darnos cuenta de que quien puso su dinero a generar interés en
el banco, durante todo un año, al cabo del mismo terminó con menos riqueza en términos
reales, pudiendo comprar mucho menos de lo que compraba al inicio de dicho
período.
Si el 2021 fue un año inflacionario, las
expectativas para este 2022 son aun peores. Desde el contexto internacional, ya
desde fines del año pasado se conoció que países como Estados Unidos y España
tuvieron valores récords en sus índices de precios, números que no se habían alcanzado
por más de 40 años. Históricamente, la Argentina es un importador serial de
inflación. Todo lo que pasa afuera acá los replicamos siempre en mayor escala, por
lo que a priori si en 2021 tuvimos una inflación mayor al 50%, con una inflación
ahora global récord, es de esperar que lamentablemente dichos valores locales
sean aún mayores.
A la inflación esperada se le sumó un nuevo
problema en el plano internacional, y es el conflicto en Ucrania. Siempre
hablando en términos económicos, que es lo que nos ocupa en este espacio, la
guerra viene a traer una serie de consecuencias que podríamos llamar “mixtas”
para nuestro país. Por un lado, el alza en el precio de los productos
agropecuarios podría en cierta medida beneficiar a la Argentina, productora de
ese tipo de bienes, lo que permitiría que ingresen más dólares a las arcas del
BCRA. Las consecuencias malas creemos son mayores. Y esto viene de la mano del
precio de la energía (petróleo y gas) volando a valores máximos producto de la
guerra. Argentina es importadora de petróleo y gas, y teniendo en cuenta que se
nos viene el invierno en unos meses, esto podría generar un gran encarecimiento
del precio que se paga por traer toda esa energía desde el exterior. Seguimos importando
inflación.
Desde el plano local, y en relación a
esto último que comentábamos respecto a la energía, desde el gobierno se esta
hablando de un aumento de tarifas para este 2022. El aumento del que se habla
seguramente no compensará el mayor costo de importación de esa energía, por lo
que se podría esperar que a lo largo del año la quita de subsidios sea mayor a
la esperada.
Todo ese encarecimiento de tarifas más
altas, combustible más caro, por ende logística y transporte también más caro,
no hace otra cosa que potenciar la inflación esperada para este año. El 52% del
2021 pasa ahora a ser un numero casi deseable.
Aumenta la cuota de la escuela, la obra
social, la luz, el gas, la nafta, el transporte, la logística que lleva los
productos hasta los distintos puntos de venta, y la lista podría seguir. Por
motivos externos e internos, se espera que el numero final que arroje la
inflación para este 2022 sea superior al 52% del año anterior. Existen
analistas económicos que se animan a decir que el número superaría el 60%.
Acerca de qué alternativa fácil, que
pueda entender cualquier inversor principiante, existe para por lo menos
empatarle a la inflación es de lo que hablaremos hoy. No es un partido fácil,
este año el rival parece ser aún más fuerte, pero con una preparación y
estrategia adecuada podremos sacar un empate y hasta incluso ganarle sin correr
grandes riesgos.
EL PRIMER PASO: ANALIZAR CÓMO ESTAMOS
JUGANDO
¿Cuáles son los dos grandes refugios del
argentino promedio para guardar sus ahorros? El dólar (quien puede comprarlo debido
al cepo) y el plazo fijo. Veamos qué puede esperarnos con cada uno.
En cuanto al dólar, por supuesto que
siempre hay que tener. A diferencia de lo que la bibliografía internacional acerca
de finanzas nos dice, en Argentina el dólar ES una inversión. Ahora bien, no es
saludable poner todos los huevos en una misma cesta… tener todos los ahorros en
esa moneda nos dejaría muy expuestos a lo que con ella pueda pasar. Además hay
que tener en cuenta que con el cepo al dólar cada vez es más difícil ahorrar en
dicha moneda, y otro tema importante a considerar es qué hacer con los dólares
una vez comprados… ¿los dejo en el banco? ¿los guardo en el hogar? De una u otra
manera no solo se están corriendo riesgos, sino que además no se están poniendo
a trabajar esos ahorros más aun en un contexto bélico como en el que estamos,
en donde históricamente también siempre hubo inflación en dólares, por lo que
se perdería poder adquisitivo aun en esa moneda fuerte.
Respecto al plazo fijo, si bien comenzó
el año con una suba y luego otra suba más ubicando las tasas en torno al 41%
anual, dicho valor sigue considerablemente por debajo de los valores esperados
de inflación que venimos tratando.
Si así estamos saliendo a jugar este difícil
partido, con esta formación, la probabilidad es que nuevamente acabemos
perdiendo y esta vez por goleada.
ESTRATEGIA
En los párrafos anteriores nos dedicamos
a describir lo que pasó en el 2021, comentar el escenario actual, y tratar de
predecir con fundamentos lo que nos puede esperar para este 2022. Sin dudas el
problema a atacar, la gran amenaza para nuestros ahorros en este año, y quizás el
que viene también, es la inflación. Y la inflación aun más que el dólar. El
agro puede darnos este año un respiro en cuanto a ingreso de divisas y ni que
hablar un acuerdo con el fondo próximo a votarse (esperemos con acuerdo
definitivo). Mas allá de eso, siempre debemos pensar que un dólar al alza con
el tiempo se traduce también en un aumento en los precios y eso es inflación.
Por lo expuesto, por una vía o por la otra, el problema es la inflación.
Para tratar de atenuar sus efectos sobre
nuestra riqueza personal, sea poca o mucha, y nuestro poder adquisitivo, diseñamos
la siguiente estrategia.
Por un lado, para aquellos que son
emprendedores, tienen un comercio, y su producto o su materia prima puede
stockearse fácilmente, lo recomendable en estos casos es formar stock. Comprar
productos o materias primas. Esto es así ya que al cabo de un año, el valor de
esos bienes necesarios para el desarrollo de su actividad generadora de flujo
estará sin dudas mucho más alto que las tasas de los plazo fijos e incluso que
las mediciones de la inflación que realiza el INDEC (CER y UVA) que son
utilizados como cláusulas de ajuste en las inversiones Inflation linked. Lo
decimos una vez más, si su actividad esta ligada a la compra de insumos, forme
stock. Si a ese stock lo puede pagar en cuotas y sin interés mucho mejor.
Ahora bien, vayamos al caso del
asalariado que no tiene un negocio propio, o el autónomo que brinda servicios y
no entra en esta idea presentada de formar stock comprando insumos. Para ellos
la estrategia que proponemos es invertir en Fondos Comunes de Inversión con
Ajuste por Inflación. Veamos por qué.
Ya hablamos de la inflación del 2021 en
torno al 52%. Los FCI con ajuste por CER para el mismo periodo 2021 tuvieron en
promedio retornos cercanos al 58% (se tuvo en cuenta los FCI de las principales
Alycs del mercado). Estos FCI no solo no perdieron contra la inflación, sino
que terminaron ganando el partido.
Y ¿Qué son estos FCI que ajustan por CER?
Básicamente se trata de una inversión de bajo riesgo, que podría definirse como
un patrimonio integrado por todos los inversores (cuotapartistas) que tienen un
objetivo común de inversión, y forman ese capital que será gestionado por expertos
(administrador del fondo) bajo la regulación de la Comisión Nacional de Valores
(CNV).
Para el caso que nos ocupa, estos FCI están
en su gran mayoría, y por reglamento de gestión, compuestos por diferentes
instrumentos con algún tipo de clausula de ajuste por inflación. En la
actualidad, mayormente dichas carteras se encuentran integradas por Bonos Nacionales
con ajuste CER (TX22, TX23, etc.), Letras del Tesoro con Ajuste CER (Lecer),
Títulos de Deuda Corporativa con Ajuste CER, y en menor medida (y por exigencia
legal) liquidez para atender los rescates de los cuotapartistas.
Ahora bien, ¿por qué invertir en estos
FCI y no en Plazo Fijo UVA si ambos ajustan por inflación? Esta pregunta tiene
varias respuestas:
-
LIQUIDEZ. El plazo fijo UVA tiene un plazo mínimo de 90
días, en tanto que un FCI con ajuste CER puede ser retirado parcial o
totalmente a las 48hs.
-
ADMINISTRACIÓN DEL AHORRO. Quienes tengan la capacidad de
generar un ahorro mensual, semanal, o con cualquier periodicidad, podrán ir
sumando ese ahorro al FCI en cada oportunidad. Se puede agregar o quitar del
fondo en cualquier momento, y el monto mínimo a agregar es tan solo de $100.
Quienes opten en cambio por el plazo fijo UVA, o bien tendrán que esperar el
vencimiento del mismo a los 90 días para agregar más, o ir constituyendo nuevos
plazos con cada ahorro pero siempre sabiendo que vencerán a los 90 días.
-
RENDIMIENTO. En 2021, el rendimiento de los FCI con
ajuste por inflación fue mayor que el de los plazo fijos UVA.
EMPIEZA EL PARTIDO
Operar fondos comunes de inversión es muy
fácil. Si bien todos los bancos cuentan con una familia de fondos comunes de inversión
entre los cuales seguro existe alguno con esta característica de ser un FCI con
ajuste CER, y en ese caso operar puede ser tan simple como manejar el home
banking de su entidad financiera; existen también otros fondos que son los
gestionados y/o comercializados por las Alycs (Invertir Online, Balanz, Bull Market,
Banza, IEB, por nombrar algunas) que han tenido rendimientos mayores a la
inflación el año pasado. Para operar estos fondos solo se requiere abrir una
cuenta en esos Brokers. Abrir ese tipo de cuentas no solo es gratuito sino que
es tan fácil como abrir una red social, se trata de completar unos datos
personales, un par de selfies y fotos al DNI y listo. Todo desde el celular o
la PC y en la comodidad de su hogar. Una vez abierta la cuenta solo se debe
transferir los fondos que se desean invertir al CBU de la cuenta en el broker y
en unos pocos minutos el dinero esta disponible para ponerse a trabajar.
El partido que se viene este 2022 no es
para nada fácil. Si ya perdimos el del 2021, no dejemos pasar la oportunidad de
tener revancha. No debemos acostumbrarnos a perder.
Si necesitan una ayuda…acá hay equipo.