Invertir en Cobre

 


¿Sabías que ese cable que carga tu celular o la computadora desde donde estás leyendo este artículo tienen un componente que viene desde la prehistoria y a su vez es vital para la inteligencia artificial? Ese componente es el cobre, un metal que ha acompañado a la humanidad desde los primeros tiempos y que, curiosamente, parece tener un papel cada vez más relevante para el futuro. Aunque no tenga el mismo glamour mediático que el litio, el cobre es el pilar sobre el que se mantiene gran parte de nuestra tecnología actual. Y, si los expertos en finanzas y en tecnología tienen razón, esto es solo el comienzo.

A lo largo de este artículo vamos a conocer más sobre este metal rojo, sus diferentes usos, y cómo  podemos invertir en el.

 

El cobre: ¿Qué es y por qué es tan especial?

Para entender por qué el cobre es tan fundamental en el mundo de la tecnología, empecemos por lo básico: ¿Qué es el cobre? Es un metal de color rojo que, a diferencia de muchos otros, es excepcionalmente buen conductor de electricidad y calor. También es maleable, resistente a la corrosión y duradero. Todas estas propiedades únicas lo convierten en un recurso insustituible para fabricar cables, circuitos, motores, generadores y, en general, cualquier cosa que dependa de la electricidad para funcionar. En resumen, donde hay tecnología, hay cobre.

Pero ¿de dónde viene todo este cobre? La mayor parte se extrae de minas en Chile, Perú, China y Estados Unidos, países que concentran el grueso de la producción mundial. Es cierto que el cobre no es renovable en un sentido estricto; es decir, no se "regenera" como los árboles por ejemplo, pero se recicla en un porcentaje altísimo. De hecho, el 80% del cobre extraído a lo largo de la historia sigue siendo utilizado, algo que lo diferencia de otros materiales más "descartables" y eleva su valor de mercado.

 

El uso del cobre en la tecnología

Electrónica de consumo:   Desde tu celular hasta la heladera, el cobre está presente en los circuitos y cables que permiten que estos dispositivos funcionen. La conductividad del cobre es superior a la de cualquier otro material, así que si alguna vez sentiste curiosidad por cómo la energía eléctrica llega de la fuente a tu televisor, el cobre tiene la respuesta.

 

Inteligencia Artificial y Big Data:   La inteligencia artificial no solo depende de sofisticados algoritmos, sino también de una infraestructura física robusta: servidores, cables de datos y centros de procesamiento. El cobre es clave aquí porque se utiliza en las conexiones de alta velocidad que unen los componentes de las redes neuronales que "piensan" en la IA. Y como la IA va a necesitar cada vez más potencia de cálculo, la demanda de cobre no hará más que crecer.

 

Telecomunicaciones e Internet:   Si bien la fibra óptica ha revolucionado las comunicaciones, el cobre sigue siendo el corazón de las redes de telecomunicaciones. La mayoría de las conexiones a internet y sistemas de telecomunicación siguen usando cobre en sus cables que llevan internet desde las grandes torres a tu casa. Por lo tanto, cada clic, video o llamada que haces depende del cobre en algún punto de la cadena.

 

Cobre vs. Litio: ¿Amigos, enemigos o socios?

Ambos materiales son esenciales en el mundo tecnológico, pero se utilizan de maneras diferentes. Mientras que el cobre es crucial para la transmisión de energía y datos, el litio es indispensable para almacenar esa energía, especialmente en dispositivos móviles y vehículos eléctricos. Imagínate un auto eléctrico: el litio se encarga de alimentar el motor, pero el cobre hace posible que la energía fluya de las baterías a las distintas partes del vehículo.

Ahora bien, siendo este un Blog de Finanzas, nos parece importante identificar cuál va a ser ese elemento que más necesite la tecnología en el futuro, ¿Litio, cobre, o ambos? La respuesta va a depender del tipo de tecnología que se imponga. Si la tendencia se mantiene en la electrificación de vehículos y la expansión de dispositivos inteligentes, ambos materiales verán un aumento de demanda. Sin embargo, el litio está más sujeto a innovaciones que podrían hacerlo menos necesario (por ejemplo, con nuevas baterías de sodio que están en desarrollo), en tanto que el cobre parece ser irremplazable debido a su exclusividad como conductor.

 

¿Cómo invertir en cobre?

Para quienes miran al cobre como una inversión a largo plazo, hay varias empresas cotizando en bolsa dedicadas a la extracción y comercialización de este metal. Aquí te presento algunas de las más grandes a nivel mundial que se pueden sumar desde Argentina y en pesos vía Cedear:

Freeport-McMoRan (FCX): Esta empresa estadounidense es una de las mayores productoras de cobre del mundo, con operaciones en América del Norte y Sudamérica. Es conocida por su mina de cobre en Grasberg, Indonesia, una de las más grandes a nivel mundial.

Southern Copper Corporation (SCCO): Con sede en México y operaciones en Perú, esta compañía es una de las más rentables y eficientes del sector.

BHP Group (BHP): Aunque BHP es más conocida por su producción de hierro, también es uno de los gigantes del cobre. La compañía tiene minas en Chile y Australia.

Vale (VALE): El gigante minero brasileño informó que para 2028 espera ampliar su capacidad de producción de cobre a 500.000 toneladas. Una idea para invertir en cobre pero en Brasil y no EEUU.

Rio Tinto (RIO): Empresa minera multinacional que extrae hierro, cobre, carbón, sal, aluminio, entre otros. En 2023 Rio Tinto produjo cerca de 560.000 toneladas de cobre. Es una de las compañías con explotación en San Juan, Argentina.


¿Qué dicen los grandes inversores?

El cobre no ha pasado desapercibido para figuras influyentes en el mundo de las finanzas. Por ejemplo, Jeff Currie, jefe global de investigación de materias primas en Goldman Sachs, ha llamado al cobre "el nuevo petróleo" por su papel fundamental en la transición energética. La firma predice que, con el crecimiento de la demanda en los sectores de energías renovables y vehículos eléctricos, el precio del cobre podría duplicarse en los próximos años.

 

El futuro del cobre: ¿Nos faltará algún día?

Aunque el cobre es reciclable en un 100% y ya se recicla en gran medida, se espera que la demanda siga creciendo y algunos expertos alertan sobre un posible déficit. Esto abriría la puerta a nuevas exploraciones mineras, avances en reciclaje y, por supuesto, la posibilidad de que los precios se disparen.

Si de algo estamos seguros es que cuando uno piensa en invertir a futuro, el negocio que sea estará ligado a la tecnología. Se dijo alguna vez que si el negocio es el oro, una buena estrategia inversora pasa por comprar acciones de las empresas indirectas y no ir en forma directa al oro. Es decir, invertir en empresas que fabriquen picos y palas para extraer el oro va a ser una inversión indirecta que se va a ver beneficiada por el negocio principal al que todos acudirán. Con el cobre puede pasar algo parecido. Si crees que la Inteligencia Artificial o cualquier otra tecnología va a ser el negocio del mañana, no te mates buscando cuál será la empresa que logre destacarse en ese sector, de seguro todas estarán usando Cobre.