SP500
Cuando Warren Buffett cerró la
carta anual dirigida a sus inversores a finales de 2020, todavía en plena
pandemia, dijo: “Nuestra conclusión es inquebrantable: Nunca apuesten contra
Estados Unidos”. El entusiasmo de Buffett por el futuro de la economía de
EEUU se mantiene intacto ya que sigue elogiando la capacidad de dicho país para
soportar interrupciones y crisis severas.
La economía de Estados Unidos
supo enfrentar crisis, guerras mundiales, atentados, quiebras de bancos,
pandemias, inflación, recesión, y aún así si uno mira sus índices a largo plazo
es una economía que no para de crecer.
Para mostrar en un gráfico los
dichos de Buffett veamos el desempeño del SP500 desde su creación hasta hoy:

Si le preguntáramos a un niño que
mire la línea y nos diga qué dirección toma, si hacia abajo, si se mantiene
lateral o si sube, respondería sin dudar que la línea va hacia arriba.
Somos los adultos los que no logramos abstraernos de los eventos que generan
pánico y nos hacen ver riesgo donde no lo hay. Se podría casi afirmar que a
largo plazo el riesgo de invertir en la economía de EEUU es casi nulo.
La probabilidad histórica de
ganar dinero en el mercado estadounidense es:
50 % cuando se invierte durante
solo un día
68% cuando se invierte durante un
año
88% en períodos de 10 años (nótese
que ya las probabilidades en ese plazo están muy a favor)
100% en períodos de 20 años o
más.
Es decir, si uno comienza a
invertir en forma temprana en la bolsa de Estados Unidos y lo hace por 20 años
o más, no hay probabilidad de perder. ¿Y por qué no lo hacemos? Mucho tiene que
ver el desconocimiento sobre este tipo de inversiones, la falta de educación
financiera y también los sesgos cognitivos (trampas mentales) que nuestro
cerebro nos pone como inversores. Imagínense que nos hubiera tocado vivir cada
uno de los eventos marcados en el gráfico, la psicología financiera dice que la
mayoría de las personas piensa que la crisis que esta viviendo siempre es peor
que la anterior. La famosa frase “esta vez es diferente” o, “esta vez
es peor” lleva a inversores a entrar en pánico y huir de sus tenencias
antes que todo desaparezca.
Es en esos momentos que
deberíamos nuevamente llamar al niño para que nos recuerde la dirección en la
que va la línea. Sin dudas él lo verá con mucha más calma.
SP500
Hablamos de la economía de
Estados Unidos y representamos en un gráfico la historia de dicho mercado desde
la crisis de 1929 hasta hoy (Octubre 2023). Esa línea del gráfico es un índice creado
por una de las más prestigiosas calificadoras de riesgo a nivel mundial: Standard
& Poor´s.
La empresa Standard & Poor’s
creó en 1923 un índice bursátil integrado por las 233 empresas más
representativas de la economía norteamericana. Tiempo más tarde, en 1957 amplió
dicho listado a 500 empresas y el índice pasó a llamarse como aún hoy se conoce
SP500.
El SP500 recoge las 500 empresas
estadounidenses más representativas de la economía de ese país, seleccionadas
teniendo en cuenta su tamaño, liquidez, representatividad dentro del sector, entre
otras características. Se trata entonces del índice que reúne las 500 empresas
más grandes del mundo y dado que lo principal que se tiene en cuenta es su
capitalización (tamaño), no contempla a empresas pequeñas y medianas que
podrían tener menos armas para responder a eventos como los vistos. Esto no es
un punto menor toda vez que cuando uno piensa a largo plazo debe saber que más
tarde o más temprano se va a estar expuesto a un evento o crisis. Recordemos siempre
llamar al niño cuando eso pase.
Eventos va a haber siempre, en
todo el mundo. Y muchos serán impredecibles e inevitables. Lo importante de
conocer el desempeño del SP500 es que ha dado muestras de que pudo superar cada
uno de esos eventos que parecían, individualmente, uno peor que el otro.
Entre las empresas que integran
el SP500 podríamos destacar en orden de ponderación: Apple, Microsoft,
Google, Amazon, Nvidia, Berkshire Hathaway, Tesla, Meta, Visa, por citar
las más importantes. Cabe destacar que a lo largo del listado de estas 500
empresas, se pueden encontrar las principales firmas de sectores como
tecnología, industria, salud, bancos, energía, servicios públicos, materiales,
inmobiliario y comunicación. Esto es muy importante dado el aporte que hace a
la diversificación teniendo en cuenta que se contemplan todos los sectores de una
economía (diversificación sectorial).
¿Conviene invertir en SP500?
La pregunta del título la puede
responder cualquiera con solo volver a mirar el gráfico.
Invertir en el índice SP500 puede
ser la estrategia ideal para aquellos inversores que reúnen las siguientes
características:
-
Son inversores principiantes o con poco
conocimiento en mercados,
-
Disponen de poco tiempo para seguir sus
inversiones,
-
Cuentan con poco capital,
-
Quieren formar un capital a largo plazo.
Nos gusta explicar el por qué de
cada cosa que decimos así que avanzamos un poco más. Lo recomendamos para inversores
principiantes o con poco conocimiento porque permite con una sola compra
(el índice) diversificar de una vez en las 500 empresas más importantes del
mundo. Respecto al tiempo a dedicarle a la inversión no se
necesita hacerle un seguimiento constante. La estrategia ideal será la de
realizar aportes todos los meses a la cartera sin importar si estamos viviendo
un evento de pánico o uno de euforia en los mercados, conocemos a la larga la
dirección que toma la línea y no necesitamos hacer un seguimiento diario. Nos
gusta decir que es una inversión que se maneja con piloto automático.
En cuanto al capital necesario
para invertir, es mucho más conveniente comprar el índice que comprar en
forma individual cada una de las 500 empresas que lo componen.
El plazo sí pasa a ser una
condición y esto lo queremos dejar bien en claro. Si un inversor compra el
índice SP500 sabiendo que al cabo de un año va a necesitar contar con el
dinero, la elección habrá estado mal. Se recomienda invertir en renta variable a
largo plazo. Ahora bien, seguro nos preguntarán ¿Qué es a largo plazo?
¿Cuándo hay que vender? A la segunda pregunta Warren Buffett diría “¡nunca!”,
pero déjenos responderles con otra pregunta: ¿Qué objetivos persiguen a largo plazo?
(si no los tienen deberían pensarlos). La libertad financiera, planificar el
retiro, son algunos ejemplos de objetivos a largo plazo. Para estos objetivos
el SP500 se adapta a la perfección y junto al efecto del interés compuesto los
objetivos de largo plazo serán una realidad.
¿Cómo invertir en SP500 desde
Argentina?
Desde Argentina podemos invertir
en el índice SP500 a través del instrumento de inversión Cedear.
Los Cedear son certificados que
se pueden comprar en pesos en la Bolsa local, y es la forma que tiene un
inversor argentino de comprar acciones de compañías e índices que cotizan en EEUU.
No solo tienen la ventaja de poder comprarse en pesos, sino que tienen una
ventaja más y es la de ser una inversión ligada al dólar (en este caso al dólar
financiero llamado Contado con Liquidación, o CCL). Esto es una ventaja toda
vez que si el dólar sube, el Cedear subirá también por efecto de esa variable.
Es decir, el valor del Cedear se va a mover en función de dos cosas:
-
El valor del dólar CCL, y
-
La cotización del activo principal (la empresa o
el índice comprado).
La primera de las variables ya
sabemos cómo se mueve en nuestro país. Para la segunda, en lo que tiene que ver
con el SP500, solo basta con mirar una vez más el gráfico. Las probabilidades juegan
mucho a nuestro favor.
Este Cedear se llama SPY y
puede comprarse a través de cualquier Sociedad de Bolsa o Banco con tan solo un
par de clics. El monto mínimo para operar en este índice desde Argentina es el
valor de un Cedear de SPY que al momento de escribir este artículo asciende a $18.616.-
Con esa inversión mínima un
inversor argentino estará no solo invirtiendo de una vez en las 500 empresas
más importantes del mundo, estará ligando su inversión al valor del dólar y por
último, y no menos importante, estará comenzando a diseñar su futuro.
El futuro es el resultado de las
acciones presentes. No dejes para mañana SPY que puedas comprar hoy.