Estrategia de inversión
Los invitamos a dar un paseo por el laboratorio del mercado de capitales con el fin de sacar algunas conclusiones que puedan ser aplicadas a la hora de invertir. Vamos a repasar algunos experimentos llevados a cabo con la idea de encontrar la mejor manera de ganar asumiendo el menor riesgo posible.
Ibboston Associates, una firma de datos e investigación de inversiones que ahora forma parte del gigante de datos financieros Morningstar, Inc. se hizo famosa por sus estudios y análisis en el campo de la inversión y la gestión de riesgos. Fundada a inicios del siglo XX, la empresa ha ganado una reputación sólida por sus investigaciones meticulosas y sus contribuciones al entendimiento de las estrategias de inversión. A lo largo de su existencia, Ibboston Associates ha trabajado en colaboración con universidades, instituciones financieras y organizaciones gubernamentales para desarrollar y validar teorías y prácticas en el ámbito de las finanzas.
La compañía diseñó un experimento que duró diez años que tenía por objeto revelar la mejor estrategia para operar en el mercado de capitales. En este experimento, compararon dos estrategias de inversión utilizando el mismo monto total de dinero: 12.000 dólares.
Ambas estrategias invirtieron en el mismo índice de acciones, garantizando que cualquier diferencia en el rendimiento se debiera exclusivamente a la estrategia de inversión y no a variaciones en el tipo de activos. Expliquemos brevemente las dos estrategias a comparar:
Estrategia 1: Inversión Global (Lump-Sum Investment):
En esta estrategia, un inversor destina los 12.000 dólares en una única compra de acciones al inicio del experimento. Todo de una sola vez y luego se sienta a esperar el resultado de dicha inversión. Esta estrategia pone todas las apuestas en el precio de las acciones en ese momento, con la esperanza de que el valor de las acciones aumente con el tiempo.
Estrategia 2: Inversión Periódica (Dollar-Cost Averaging):
Aquí, el mismo monto total de 12.000 dólares se distribuye en inversiones mensuales de $100 dólares durante los diez años, sumando un total de 120 compras. No compra todo de una vez sino que lo va haciendo “en cuotas”.
Esta estrategia se beneficia del precio promedio de compra, ya que cuando el precio de las acciones esta alto se puede comprar menos cantidad con esa misma suma, en tanto que cuando el precio de las acciones está a la baja con los mismos 100 dólares se pueden comprar más acciones. Dicho de otro modo, esta estrategia permite comprar más cuando esta barato y comprar menos cuando esta caro.
Descripción del Proceso
Periodo del Experimento: 2000 - 2010.
Monto Total de Inversión: U$S12.000
Estrategia de Inversión Global: Inversión única de U$S12.000 al inicio del año 2000.
Estrategia de Inversión Periódica: Inversión de U$S100 mensuales durante 120 meses (10 años).
Activos invertidos: El índice elegido fue el S&P 500, que incluye las 500 empresas más grandes y representativas de la economía estadounidense. La razón detrás de esta elección es que el S&P 500 ofrece una amplia diversificación y es un indicador sólido del desempeño general del mercado de valores.
Resultados del Experimento
Al final de los diez años, Ibboston Associates analizó el valor final de ambas carteras. Aquí están los hallazgos:
- Cartera de Inversión Global:
Valor inicial invertido en enero de 2000: U$S12.000 dólares.
Valor final de la cartera en diciembre de 2010: U$S14.500 dólares.
La inversión de una suma global en enero de 2000 significó comprar acciones del S&P 500 a un precio relativamente alto, ya que el mercado estaba cerca de su pico antes de la caída de las puntocom. Más tarde la crisis financiera de 2008 tuvo un impacto significativo, reduciendo considerablemente el valor de la cartera antes de la recuperación en los años siguientes.
- Cartera de Inversión Periódica:
Inversiones mensuales de U$S100 durante 120 meses.
Valor final de la cartera en diciembre de 2010: U$S16,200.
Al distribuir las inversiones a lo largo de diez años, el inversor compró acciones a precios variados, beneficiándose particularmente de los precios más bajos durante los periodos de recesión. Esta estrategia permitió un costo promedio por acción más bajo, ya que se compraron más acciones durante las caídas del mercado y menos durante los picos.
La comparación final mostró que la inversión periódica no solo tendió a mitigar los riesgos asociados a las grandes fluctuaciones del mercado, sino que también produjo un rendimiento ligeramente superior al de la inversión global. Esto se debe a que la inversión periódica promedió los costos a lo largo del tiempo, protegiendo al inversor de los picos y valles del mercado.
Bien podríamos ya sacar algunas conclusiones sobre este experimento, pero no fue el único. Durante la gran depresión de la crisis del 29 se llevó a cabo el mismo experimento. Es decir, dos veces se tomaron diez años como muestra para revelar la mejor manera de invertir a largo plazo.
Veamos a continuación lo que pasó en ese otro experimento.
Descripción del proceso:
Periodo del Experimento: 1929 - 1939.
Monto Total de Inversión: U$S12.000
Estrategia de Inversión Global: Inversión única de U$S12.000 al inicio de 1929.
Estrategia de Inversión Periódica: Inversión de U$S100 mensuales durante 120 meses (10 años).
Activos invertidos: El índice utilizado para este experimento fue el Dow Jones Industrial Average (DJIA), que incluía a 30 de las principales empresas industriales de Estados Unidos. Este índice era y sigue siendo uno de los principales indicadores del desempeño del mercado de valores estadounidense.
Resultados del Experimento
Veamos los resultados pasados los diez años.
- Cartera de Inversión Global:
Valor inicial invertido en enero de 1929: U$S12.000.
Valor final de la cartera en diciembre de 1939: U$S6.000. Si, se perdió la mitad del capital invertido.
La inversión de una suma global al inicio de 1929 significó comprar acciones justo antes del colapso del mercado en octubre de ese año. La cartera experimentó una pérdida masiva en valor y, aunque hubo una recuperación parcial hacia el final de la década, nunca alcanzó el valor inicial
- Cartera de Inversión Periódica:
Inversiones mensuales de U$S100 durante 120 meses.
Valor final de la cartera en diciembre de 1939: U$S 14.000.
Al distribuir las inversiones a lo largo de diez años, el inversor compró acciones a precios extremadamente bajos durante los años más duros de la Depresión. De nuevo puede verse que esta estrategia permitió un costo promedio por acción muy bajo y se benefició de la recuperación gradual del mercado en los años posteriores.
Lecciones Aprendidas
El experimento de Ibboston Associates destaca una lección fundamental para los inversores: El estudio subraya la importancia de la disciplina y la consistencia en la inversión. Para los inversores que buscan minimizar riesgos y maximizar rendimientos a largo plazo, la inversión periódica se presenta como una estrategia sólida y efectiva. En un entorno financiero incierto, repartir las inversiones a lo largo del tiempo puede ofrecer no solo mayor tranquilidad, sino también mejores resultados financieros. Crisis hubo y las habrá siempre, eso es lo más certero que existe en el mundo de las finanzas, y la estrategia de la inversión periódica es sin dudas la que mejor desempeño supo demostrar.
Es una buena noticia para el pequeño inversor que no cuenta con un gran capital inicial, y que solo puede comenzar a invertir de a pequeños aportes periódicos mensuales.
Invertir pequeñas cantidades regularmente reduce el impacto de la volatilidad del mercado. En lugar de correr el riesgo de invertir una gran suma en un momento desfavorable, las compras periódicas suavizan las fluctuaciones del mercado.
Estas pruebas de laboratorio vienen a demostrar que la estrategia de la inversión periódica es como tener una máquina del tiempo que nos permite evitar los malos momentos y aprovechar los buenos. Para quienes alguna vez vieron Volver al Futuro, sería algo así como tener un DeLorean financiero. En lugar de apostar todo en un solo viaje, utilizamos el DeLorean para hacer pequeños saltos en el tiempo comprando acciones a precios promedio evitando las grandes crisis.
Un experimento para ganar. ¡Y todo sin necesidad de condensadores de flujo!