Argentina, un caso único.
¿Por qué Argentina puede ser una oportunidad para invertir? Te lo explicamos a continuación.
De acuerdo con las calificadoras internacionales desde hace unos años Argentina pertenece a la categoría Standalone que bien podría traducirse como “está en la lona”.
Si verdaderamente buscáramos la traducción de Standalone encontraríamos: Único, independiente. Argentina sí podría catalogar como un país único si estuviéramos categorizando calidad de futbolistas, de carne, o de dulce de leche, pero en un blog de inversiones sabemos que no vamos a tocar estos temas así que difícil sea algo bueno.
A continuación te explicamos qué son estas categorías, quién las elabora, para qué, y por qué puede ser una información muy importante al momento de tomar una decisión de inversión.
Morgan Stanley Capital Internacional, más conocida por sus siglas MSCI, es la principal empresa en el mundo proveedora de índices bursátiles, aquellos que se toman como referencia a la hora de construir los fondos de índices y los ETFs.
Existen tres categorías las cuales estarán en función no solo del desarrollo del país sino también de su mercado de capitales.
Mercados Desarrollados, Mercados Emergentes y Mercados de Frontera son las tres grandes categorías que utiliza MSCI para clasificar a los países. Podríamos hablar de una cuarta categoría que se ubica por debajo de estas tres, aunque técnicamente el MSCI no la considera categoría en si, sino como un grupo de países que se encuentran deslistados, es decir, no pertenecientes a ninguna de las categorías listadas. Estos países no listados en ninguna categoría reúnen la característica de ser “únicos” para MSCI, de ahí la calificación de Standalone. Se dieron cuenta que nada tenia que ver la calidad de nuestra carne o nuestros futbolistas en esto.
Veamos a continuación un cuadro con las distintas categorías y los países que las integran.
No es sencillo entrar en el selecto grupo de los Mercados Desarrollados y de hecho solo 23 países en todo el mundo lo consiguen. De América solo dos, Estados Unidos y Canadá. El resto la mayoría son europeos. El término mercados desarrollados refiere a “mercados bursátiles desarrollados de países desarrollados”. Es decir, no basta con ser un país desarrollado para entrar en esta categoría, ya que además debe contar con un mercado de capitales desarrollado. Vemos así que por ejemplo países desarrollados como Polonia, Hungría, China y Taiwán no forman parte de esta clasificación por no tener su mercado de capitales desarrollado.
En cuanto a los Mercados Emergentes son 24 los países que lo componen. Brasil, México, Egipto, Arabia Saudita, China e India son algunos ejemplos. En muchos casos se trata de economías en vías de desarrollo y en otros son países ya desarrollados, pero que les falta algo en materia bursátil.
En la categoría Mercados de Frontera encontramos una gran heterogeneidad. Un total de 28 países integran la categoría con muchos estados africanos, la mayoría pobres. Dentro de la variedad encontrada en esta categoría también se encuentran países más ricos como Bahréin e Islandia, aunque retrasados en el desarrollo bursátil.
Finalmente llegamos a los deslistados, los denominados Standalone. Ahí encontramos casos inmersos en conflictos armados como Ucrania, Rusia y Palestina, y por supuesto Argentina. Un premio Nobel de Economía llamado Simon Kuznets supo decir una vez: “hay cuatro clases de países, los desarrollados, los en vías de desarrollo, Japón y Argentina”. Triste, pero cierto.
Es así, hace años estamos en la lona. Pero muchas veces cuando se esta en el suelo la única alternativa que queda es levantarse, ¿Cuánto más abajo se puede ir?
Lo sabemos, siempre hay un subsuelo si hablamos de Argentina pero dejanos explicarte algo, cada vez que uno tiene que decidir realizar un trade o no, debe evaluar las probabilidades de que salga bien respecto de las probabilidades que salga mal (ratio Beneficio – Riesgo). Argentina bien podría ser ese trade con más probabilidades de que la cosa vaya mejor y queremos compartir con vos nuestra visión.
Argentina viene mostrando señales positivas a los ojos de los inversores internacionales. Centrados en la reducción del déficit fiscal, engrosando las reservas del Banco Central y con la promesa de cumplir sus obligaciones de deuda, Argentina viene logrando reducir el Riesgo País. Dicen que el mercado siempre se anticipa y eso parece estar sucediendo hace unos meses con los Bonos Soberanos denominados en Dólares que no paran de subir, producto de esta disminución en el Riesgo País.
Ahora bien, ya el mundo no paga por ver (pay per view) como sucedió otras veces, sino que la estrategia adoptada ahora es la de esperar y mirar (wait and see). Quizás aplicando la frase “el que se quemó con leche ve una vaca y llora”, los inversores que ya se quemaron con Argentina van a querer ver más resultados concretos antes de entrar y no comprar solo con el rumor.
Cuando hablamos de resultados concretos en este aspecto nos referimos por ejemplo a que Argentina vuelva a ser listada como Mercado de Frontera. La incorporación a esa categoría llevaría a que los distintos Fondos de Inversión que invierten en esos mercados se vean obligados a sumar a sus carteras a los activos argentinos. Esto podría implicar una fuerte suba en los instrumentos locales.
Para poder proyectar las posibles subas, el ejercicio que suele hacerse es el de comparar los títulos locales con sus comparables de otros países con igual riesgo crediticio.
Hoy hay bonos argentinos (los del tramo corto de la curva de soberanos) que operan con tasas del 30%. Países como Colombia, Angola, Turquía, Sudáfrica o Nigeria muestran rendimientos en torno al 10%. Para que los bonos converjan hacia esos rendimientos, la deuda local tendría que subir más de un 100%.
Para converger hacia lo que rinde un bono de Ecuador por ejemplo, los bonos argentinos deberían subir hasta un 40%. Todo medido en dólares.
¿Cuáles son estos bonos soberanos que podrían apreciarse en caso de volver a categorizar a Argentina? Hablamos de los Bonos Soberanos denominados en Dólares, es decir, bonos emitidos por el Estado Nacional que pueden adquirirse tanto en pesos como en dólares, pero que pagan el capital y los intereses en dólares.
Se trata de los bonos utilizados para hacer Dólar MEP con la salvedad de que en lugar de venderlos inmediatamente para hacerse de dólares billetes, en este caso la estrategia pasaría por mantenerlos para beneficiarse de la apreciación de su cotización.
El tramo corto de la curva, es decir, los que vencen más rápido en el tiempo, son los AL30 y los GD30. AL difiere de los GD en función de los tribunales que van a actuar en caso de litigio por no pago. Los GD son bonos emitidos bajo legislación extranjera y por eso suelen tener algo menos de riesgo asociado, en tanto que los AL responden a legislación local. Desde Momentum creemos que el no pago de uno de ellos arrastrará a la baja al resto de los bonos, por eso, entendiendo que se está en presencia de un trade arriesgado optamos por elegir el bono que prometa un rendimiento mejor. Ya que vamos a correr riesgo, al menos que valga la pena.
A lo largo de todo este artículo hablamos de un bono en dólares, emitido por un país como Argentina que tiene su historial de defaultear su deuda, y en un contexto de falta de dólares. Quien comprenda dónde se está metiendo puede incursionar en esta aventura. El hecho de que la CNV esté quitando cada vez más trabas al mercado de capitales, y una eventual eliminación del Cepo podrían ser señales claves para un posible cambio de categoría.
Estamos en la lona pero el árbitro aun no terminó de contar, qué decís, ¿Nos levantamos y damos vuelta la pelea?